Este tipo de preguntas permiten profundizar en los programas inconscientes de nuestra mente. Facilitan por ello encontrar puntos de tensión, rozamiento y dolor. Todo lo que repetimos, proviene de un programa. Si no somos conscientes del origen, no podremos liberarlo.
“Descodificar significa liberarnos de la repetición”.
Para cada grupo de aspectos (por ejemplo, los aspectos de Plutón con la Luna), existen a su vez unas 25-30 preguntas descodificadoras. Las más importantes, por supuesto, las que se corresponden con el aspecto en cuestión.
Ejemplo: si una persona tiene una conjunción Plutón – Luna , primero podrá reflexionar sobre las preguntas descodificadoras de ese aspecto (la conjunción) y después pasar a valorar aquellas indicadas en el trígono y la cuadratura (paso 2) ; finalmente, las del sextil (paso 3).
Los trígonos suelen necesitar mucha menos descodificación. Representan oportunidades de desarrollo y el dolor emocional podría verse asociado (casi siempre cuando existe se dará en la segunda mitad de la vida) por:
- Todo aquello que “se quedó por vivir”
- Lo pendiente de experimentar
- Lo que se quedó sin unir o fraguarse
- Las simbiosis perdidas
- Los caminos que uno no se atrevió a recorrer, pese a que eran fáciles y no requerían gran esfuerzo
